Los E-Sports: la situación actual y una visión de futuro
El auge de los E-Sports en los últimos años ha sido tal que se ha convertido en uno de los fenómenos más exitosos de todos los tiempos.
El crecimiento que han sufrido impide que la regulación actual pueda acoger los nuevos tipos de trabajo que se generan, ya que estos jugadores, catalogados como profesionales, al estar dentro de una organización y una competición reglada, no disfrutan de esta categoría, que en los deportes tradicionales sí encontramos.
Por ello analizaremos la situación actual y las distintas posibilidades que encontramos en este momento.
Para comenzar, no existe una normativa y regulación específica de los e-sports en España, tanto a nivel mercantil como laboral. Actualmente el único país que ha regulado el sector es Francia (en la zona Euro).
Nos encontramos varias opciones para la regulación de los e-sports y de todos los agentes que engloban el mismo, desde los clubes hasta los jugadores, estas son:
- Mezcla de disposiciones y normativa general vigente en la legislación actual. La problemática que trae esta opción, es en aquellos casos en los que deba atenderse una situación específica del sector y por no existir norma concreta debamos emplear la general, la cual, carece de las especificaciones necesarias para resolverla.
- Regulación específica, tanto de carácter económico, para la organización de eventos como la laboral para los jugadores profesionales.
- La tercera opción reside en considerar los deportes electrónicos o e-sports como deporte. Esto permitiría aplicar las regulaciones existentes para el deporte a los e-sports.
Todas estas opciones presentan una serie de ventajas e inconvenientes para la regulación del sector. Equiparar los e-sports a los deportes tradicionales en cuanto a regulación sería la más lógica.
Se produce una actividad física e intelectual del jugador. Las competiciones que presentan una larga duración pueden suponer una exigencia física importante; pero donde predomina la actividad intelectual y su desarrollo, pues en muchos de los juegos se entrena la precisión y concentración (como el caso de los shooters) donde la precisión de los jugadores podría equipararse a los deportes actuales de tiro.
Por eso, con el paso de los años los clubes se han ido profesionalizando tanto hasta el punto de tener dentro del equipo técnico a profesionales como entrenadores, fisioterapeutas, psicólogos.
Actualmente los torneos han adquirido un carácter profesional, estableciendo sistemas de clasificación y campeones en diferentes categorías y niveles. Todo esto deriva en que los clubes de e-sports que compiten al más alto nivel cuentan con entrenadores especializados en los diversos juegos, quienes diseñan las estrategias a seguir y ayudan a mejorar a los jugadores.
Desde el punto de vista legal, la configuración actual que presentan los clubes y su relación con los jugadores es muy similar a la que nos podemos encontrar en otros deportes.
Los clubes se constituyen generalmente como Sociedades Limitadas, lo que les otorga una serie de ventajas, como otorgar personalidad jurídica a la entidad, una mejor relación para la suscripción de patrocinios, la adquisición del material necesario para los jugadores (equipo informático, periféricos, etc). Al igual que limitan la responsabilidad de los socios si el club presentase deudas.
En cuanto a los jugadores y su relación laboral con el club, las similitudes con los jugadores de deportes tradicionales permiten equiparar muchas de sus características, como son:
- Regularidad
- Voluntariedad
- Dependencia
- Remuneración
Con todo esto, podemos reafirmar la existencia de una relación de índole laboral entre clubes y jugadores. Si los e-sports fueran considerados como disciplina deportiva, podría llegar a considerarse la relación laboral de carácter especial: relación laboral de deportistas profesionales.